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El paso del huracán Florence permite que una pareja de cetáceos nade por unas calles inundadas de una ciudad de Carolina del Norte
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El paso del huracán Florence permite que una pareja de cetáceos nade por unas calles inundadas de una ciudad de Carolina del Norte
25/09/2018
Un día con paso de huracán no es un día cualquiera. Afortunadamente es tan poco común como ver delfines por tus calles. Nadando, pero delfines. Por tus calles.
Eso ha pasado en la ciudad de Wilmington, Carolina del Norte. Los estados norteamericanos de las Carolinas han sido los más perjudicados por el terrible paso de Florence, en el transcurso de su constante avanzar hacia su progresivo desgaste y fin.
Las aguas ocuparon zonas anexas a los espacios portuarios de Wilmington y en esos espacios podemos ver barcas amarradas y pudieron ser grabados una pareja de delfines. Quién sabe si fueron incapaces de nadar contra la corriente o si estaban buscando abrigo ellos mismos de la fuerza de Florence. No olvidemos que estos cetáceos son de una inteligencia casi insolente en el reino animal. Algunos testigos afirman que fueron observados también en calles anexas, inundadas. Si esto te sorprende, piensa que hay imágenes tomadas en la ciudad de Lowland (Carolina del Norte) de caimanes caminando por las calles, como si fueran recaderos extraviados, buscando una dirección para entregar una pizza mientras aún está caliente.
En medio de las tragedias, la pérdida de casi cuarenta vidas y los graves daños materiales provocados por el huracán Florence en los Estados Unidos desde que tocó tierra el pasado 14 de Septiembre con vientos fuerza de 145 kilómetros por hora, situaciones como las narradas de los despistados caimanes o los elegantes delfines casi tienen un efecto benéfico y de distensión por todo lo pintoresco que conllevan. O puede que sea tan solo nuestra mente buscando un alivio frente a la destrucción, aunque sea en situaciones tan grotescas. ¿O no es comprensible buscar algo que despeje temporalmente de tus pensamientos el dolor causado por la lectura de noticias como la de la muerte de un bebé de menos de un año, arrastrado por las lluvias?
El 80% de las muertes causadas por el huracán Florence en Norteamérica se han producido en Carolina del Norte, seguido por su vecino estado del Sur. Los huracanes como Florence o el destructor de la bella Nueva Orleans, Katrina, pasan, se degradan y nos dejan el indeleble recuerdo -mientras intentamos recomponernos- de que estamos únicamente de alquiler en esta vivienda llamada Tierra y de que no tenemos bajo control todas las devastadoras variables posibles.
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