Bioguía utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left

Vídeo

Una leona abre la puerta de un auto durante un safari y esto es lo que sucede

Una visita a un parque natural en Sudáfrica, pudo haber acabado en tragedia por falta de cuidado.

Vídeo

Una leona abre la puerta de un auto durante un safari y esto es lo que sucede

Una visita a un parque natural en Sudáfrica, pudo haber acabado en tragedia por falta de cuidado.

 

María L. Cid

21/09/2018

Viendo algunos vídeos, uno tiene la sensación de que los humanos tendemos a olvidar impunemente que un león y un gato pueden ser ambos felinos. Pero son dos criaturas muy, muy distintas. De la misma manera es muy, muy distinto ver a esos grandes animales en los vídeos de nuestro móvil o Tablet, que verlos en proximidad, a pocos metros de distancia. Incluso aunque te creas seguro en el interior de tu vehículo.

Un felino de cualquier clase y tamaño es un animal inteligente y hábil. No conviene olvidarlo. ¿Sabéis otra cosa que conviene no olvidar si alguna vez visitáis una reserva natural? Exacto: llevar los seguros de las puertas del coche, activados.

Pon a un felino de cualquier tamaño ante una puerta cerrada y se desvivirá por intentar abrirla. Manipulará con sus zarpas o zarpitas o probará a colgarse del abridor de la puerta. O como en este vídeo grabado en Sudáfrica, usará sus mandíbulas como tú usarías tu propia mano.

Afortunadamente para las hermanas sudafricanas que viajaban en este coche y grabaron este vídeo, todo ha quedado en un susto. Pudo haber sido mucho, mucho peor. Definitivamente peor.

Ellas detuvieron su coche cerca de una pequeña manada de leonas que descansaban echando la tarde y una de ellas reaccionó ante la presencia del vehículo y sus ocupantes con curiosidad. Acercó la cabeza al vehículo, olisqueó y, ¡alehop! Hincando el colmillo en la manilla de la puerta, logró abrirla.

Vídeo relacionado:

La reacción de la ocupante del asiento trasero fue veloz. El miedo es una de las magnitudes más variables en cuánto a velocidad que se conocen. Puede helarte o puede dotarte de supervelocidad. En este caso, afortunadamente, fue lo segundo. En cuanto logra cerrar la puerta en las narices de la curiosa leona, se acuerda -esta vez sí- de echar el seguro. Y lo comprueba. Y lo comprueba dos veces.

Hay estudios que demuestran que las habilidades que un felino de una manada desarrolla o aprende, los pasa a sus convecinos. Lo que aprende uno, lo aprenden todos. Tienen esa habilidad social y esa capacidad para el aprendizaje. Otra cosa es que las labores para llevar adelante la manada estén divididas, categorizadas y jerarquizadas.

Un grupo de leones africanos a la sombra. Foto: Miroslav Duchacek

Pero lo importante para nosotros, los humanos -especialmente si eres de la clase de persona que disfruta en parques naturales- es recordar que los felinos son más listos de lo que creemos. Y si nos aproximamos, les perturbamos. O, cuando menos, despertamos su curiosidad. Y sí: abren puertas. Recordad echar el seguro.

Vídeo relacionado:

share